Muchos de ustedes me han preguntado por mi microblog de Twitter o se preguntan quIen es Leonardo Velez Carrasquillo, mejor conocido en el mundo político como el Leonardillo por ensayos académicos como “Dios Es Estadista”, el cual causo gran controversia en las redes sociales, y por mis ex – autivas investigaciones a los socialistas/anarquistas/comunistas/marxistas/independentistas que buscan hacer de la UPR un punto de drogas en el que la Policia de Puerto Rico no tenga acceso. La izquierda en países democráticos que han visto el progreso se mantiene viva al dinero hecho del narcotráfico, si no me creen pregúntenle a Chavez y a sus panitas de la FARC.
Pues para aclararles las dudas, soy un joven que naci en el 21 de septiembre de 1987, por lo que fui parte de una de las mejores administraciones que ha tenido Puerto Rico desde Luis A Ferrer y Carlos Romero Barcelo, la de el doctor Pedro Rosello Gonzales, quien dirigio a mi país a prepararse para el nuevo milenio. Desde muy niño vi la obra del PNP, y mi papa, quien siempre ha sido un líder del Partido, me educo en la ideología estadista, por lo que desde pequeño desarrolle liderazgo y compromiso, y en mi escuela participaba en debates sobre la Ley Foraker etc. en los que siempre yo ganaba, pues era el mas informado y mejor que me expresaba. Los maestros quedaban sorprendidos, incluso el independentista que daba Estudios Sociales, a quien mi papa, Leonardo padre (Por eso me dicen Leonardillo), hizo que botaran pal carajo cuando empezó a hablarnos ni que de la obra de Albizu y del Grito de Lares.
Inspirado por Pedro, ese gran gobernador que representa lo que es verdaderamente la democracia, quize ser medico desde que estaba en elemental. Cuando llego a escuela intermedia comienzo a estudiar en la Bayamon Military Academy, donde me eduque en el molde militar americano, desarrollando madurez y disciplina que me ayudo a ver el problema de Puerto Rico con mayor profundidad y perspicasia. Me fui dando cuenta, en estos años, de como la colonia era peor de lo que parecía, y de como mi ciudadanía de segunda clase era una injusticia en una democracia. Mi padre, Leonardo padre, a pesar de estar ocupado siempre, siempre sacaba tiempo para ir a almorsar y para ir a bibliotecas donde me ensenaba sobre el disparate llamado Estado Libre Asociado.
En la high, fui vice-presidente y tesorero de mi clase graduanda Kenosis, y no fui presidente porque no quería el puesto. Aunque el propio director me había dicho que por mi capacidad intelectual, liderazgo y popularidad yo era el mejor candidato, tuve que rechazar el puesto presidencial, pues estaba enfocado en luchar en la política y por mi país.. Era el 2004, y mi padre y yo estabamos trabajando directamente con la campaña de re elección de Rosello, quien visito mi escuela gracias a mi y a mi padre, y dio una charla sobre la juventud y lo que nosotros representábamos. Fue un dia muy especial, el que mi padre me abrazo y me dijo lo orgulloso que estaba de mi, y fue el dia en el que Rosello ceno junto a mi familia en la misma mesa, junto a su hijo Ricky, y dijo que que en jóvenes como yo estaba el futuro de Puerto Rico y de la libertad.
Ya me había graduado, y, con el propósito de seguir el ejemplo del doctor, entre, a pesar de la oposición de mi padre y mi madre, a la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Rio Piedras, en la Facultad de Ciencias Naturales, con concentración en Biologia. Anibal Acevedo Vila se había robado las elecciones, y los animos caldeaban en esa asquerosa y miserable universidad nido de colonialistas difrazados de macheteros. Mi padre me lo había advertido, me decía que tuviera cuidado, pues la UPR era un mundo en el que te podían lavar el cerebro muy fácil con cuentos utópicos y fiestas de borrachera, marihuana y Bob Marley. Mi padre se distancio de mi un poco luego de esa decisión, pero yo, ignorantemente, desafie sus consejos, como dice la canción de la Secta All Star.
Estaba tomando mis clases de Calculo, Español, Ingles, Humanidades de lo mas bien, pero la clase que me dio problemas fue la de Ciencias Sociales, que me pedían a pesar de que no tiene que ver un carajo con lo que yo estudiaba. Me toco con nada mas y nada menos que con Waldemiro Velez padre, quien me cayo mal desde un principio, pues desde el primer dia empezó a hacer comentarios de Marx, el capitalismo en contra de los de Ciencias Naturales. Asi fue que descubri que Waldemiro Velez hijo, un gordito como el de Beverly Hills Ninja, junto a un criminal llamado Giovanni Roberto, dirigían los movimientos huelgarios de la UPR desde los 90’. Una vez, Waldemiro hijo entro al aula a anunciar una actividad socialista en medio de la clase, y su padre no dijo nada, lo permitio. Vi como Waldemiro miro con odio y desprecio mi polo Ralph Lauren que mi abuela me había comprado, y vi luego como me miro directamente a los ojos, con actitud retante, cosa que hizo estallar mi genio que suele salir solo cuando me descontrolo:
“¡Es una falta de respeto que el gordo este entre aquí a anunciar actividades terroristas e ilícitas. Usted como profesor es un irresponsable si lo permite, esta universidad es pa aprender a ser un profesional capaz, no a ser un vagoneta de la pseudo y asqueante izquierda!” grite, mientras Waldemiro daba pasos al frente hacia mi de manera amenazadora, pero su padre se le cruzo en el medio.
“Señor Velez, yo tengo libertad de catedra, y si yo quiero permitir que mi hijo, ¡Ese a quien llamas gordo! Anuncie aquí una actividad, lo hago. Si a ti no te gusta puedes darte de baja de la clase y matricularte en otro curso. No voy a permitir faltas de respeto.” dijo Waldemiro padre.
Ahí mismo yo recogi mi bulto y camine hacia la puerta, mientras Waldemiro Velez hijo me miraba con una sonrisa burlona y arrogante mientras se abotonaba su camisa de cuadritos. Ese mismo dia me di de baja, y decidi tomar el curso de CISO en otro semestre. Fue lo mejor, pues asi me pude enfocar en las actividades del PNP e ingresar a la Juventud Estadista oficialmente como Portavoz, bajo la presidencia del famoso Felix Plaud. Felix era un hombre serio, callado, muy recto en sus cosas. Nunca me relacione mucho con el. Era frio y distante, tal vez porque siempre estaba muy ocupado. Ya yo no hablaba casi con mi padre por culpa de la maldita UPR.
Para el segundo semestre me matricule en otra CISO con un negro cabron ahí que me hizo darme cuenta de que la UPR no era para mi. Podia seguir estudiando Naturales en otra universidad sin tener que sentirme como un extraterrestre por ser estadista en un nido de izquierdistas ignorantes. Este nuevo profesor en la primera clase se puso a hacer chistes sobre los estadistas y el PNP, y yo, para evitar un confrontamiento, me levante, cogi mi bulto y me fui del salón mientras un gordo barbu se reia de los chistesitos del negro calvo ese. Ahí mismo fui a la Registraduria y me di de baja total. Como ven, no me fui porque era “difícil” como dicen, es mas, yo tenia buenas notas y la Military había sido mas difícil que mi primer semestre. Mucha gente se cree que los que se van de la UPR es porque ni que es “bien cuesta arriba” cuando en verdad eso es pura mentira. Me fui porque no soportaba la intolerancia y el cinismo del sitio donde “mas libertad de pensamiento hay en Puerto Rico”. Eso es mierda. La UPR es tan arrogante y cerrada ante ideas nuevas como puede ser la iglesia católica, que en Puerto Rico es el baston de apoyo del PPD.
Sin molestar a mi padre, llame a una tia mia que da clases de Enfermeria en la Interamericana de Bayamon y le pregunte si todavía estaba a tiempo para matricularme. No lo estaba. Iba a perder un semestre por culpa de la intolerancia hacia nosotros, los estadistas. Volvi a casa con mi mirada al suelo, y mi padre estaba saliendo para irse al negocio. Cuando yo naci ya mi padre era dueño del Leonardo Sport Bar en Cataño, que heredo de su tio, pero luego vendio para dedicarse a la familia. Cuando yo entre a Kinder, con sus ahorros monto un negocio de aires acondicionados, el cual mantiene hoy exitosamente en Bayamon. Un buen negociante siempre busca hacer empresas de cosas que hagan falta, como la comida, el alcohol, medicinas y aires acoondicionados. Es algo que siempre admirado de mi papa, su visión a la hora de hacer negocios, ese deseo de superarse, de tener algo mejor, de auto retarse.
“¿Qué haces tan temprano en casa, Leonardillo? me pregunto. Yo le explique, y el, luego de mirarme unos segundos muy serio, sonrio como nunca y me abrazo. Me dijo que me vistiera, que me tenia una sorpresa.
Cuando llegamos al negocio, allí estaba el HONORABLE ALCALDE RAMON LUIS, asi como Toñito Silva, Roberto Arango y Felix Plaud. Ramon Luis abrazo a mi padre y a mi. Siempre había sido un gran amigo de la familia, pues mi padre y el se graduaron juntos. Arango saludo a mi padre con la misma gran sonrisa de siempre y a mi también. Felix Plaud nos saludo, serio y frio como siempre, y se fue a una esquina a textear, a parte del grupo. Me acuerdo de Arango, Toñito y Arango se quedaron como que le pasa a este? Pero mi papa entonces comenzó a darles un tour por el negocio, mientras Toñito me preguntaba sobre mi labor en la Juventud del PNP y sobre que estudiaba, etc. Ver a todos esos empresarios y políticos hablando de negocios me inspiro, y fue ahí cuando me convenci de que estudiaría administración de empresas como mi papa, para seguir con el negocio familiar. Eran nuevos tiempos, Rosello ya no estaba, y era hora de mirar hacia nuevos horizontes.
Ese agosto me pude matricular en la Universidad Interamericana de Bayamon, donde comencé mi barchillerato en Finanzas y Contabilidad. Por eso me he tardado un poco haciendo este. Para la campaña de Luis Fortuño estuve activo nuevamente en el PNP, aunque las actitudes de Plaud me mantuvieron distanciado. No estaba de acuerdo con muchas de sus posturas acerca de como hacer llegar la idea de la estadidad a la juventud puertorriqueña. Cuando Luis gano y saco al corrupto de Anibal del poder, al igual que al maldito PPD, en la casa de Toñito Silva hubo una celebración con fuegos artificiales a donde llegaron varios miembros del Partido e incluso llego Ramon Luis hijo con su padre, quien se tuvo que ir temprano porque se atraganto con un cantito de pan y se sentía mal. Tambien llego Arango, quien canto en el karaoke y fue allí donde conoci al tiburón blanco, Thomas Rivera Schatz. Todo lo que decía era sumamente inteligente, tenia una carisma única, y a pesar de siempre parecer serio, hacia chistes que nos hacían reir a todos. Cuando llego Felix Plaud, mi padre y Toñito dijeron “Dame un momento”, y fueron a donde Felix. Alli se formo una discusión a las afueras bien alterada, pues mi padre y Toñito repudiaba las acciones que este estaba tomando en el Partido. Justo cuando Toñito le iba a meter una bofetada, Thomas entro y tranquilizo la acalorada pelea, y le dijo a Felix que por favor se fuera. Fue un gran dia en mi vida, en el que me fortaleci y supe que mi compromiso y mi deber en la vida era luchar por la estadidad.
Esta historia continuara…
